Camouflage

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Vietnam, 1965.

Luego de una emboscada por parte del enemigo, el soldado Jackson quedó separado de su pelotón bajo un intenso fuego.

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Ya sin munición e ideas, pensó que había llegado su hora; mientras comenzaba a hilar las últimas plegarias sintió que alguien tocaba su hombro...

Al girar, sobresaltado, vio a un marine corpulento quien armado hasta los dientes dijo llamarse Camouflage y que lo iba a sacar de allí.

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Después de incontable tiempo y una batalla sin tregua, los dos hombres salieron a una zona segura, donde Camouflage se despidió diciéndole a Jackson que debía partir para cumplir una importante y peligrosa misión en solitario.

 

Tras llegar al cuartel y contar como había sobrevivido, todos se quedaron mirando a Jackson horrorizados; el médico lo tomó del brazo y lo condujo hasta la carpa que servía de hospital. Allí destapó el rostro de un cadáver y preguntó si era ese el marine de quien hablaba.

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Con voz temblorosa, Jackson reconoció a su salvador. El médico le dijo entonces que Camouflage había muerto el día anterior y que sus últimas palabras fueron: "SEMPER FI... mi espíritu irá de nuevo a la selva para salvar a un marine más..."