Medio litro de agua

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Tras un accidente aéreo, un hombre y su hijo de cinco años quedaron atrapados en medio de la selva.

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Papá sabía que debía caminar, con el niño en brazos, unos veinte kilómetros hasta el río más cercano donde, tal vez, podrían ser rescatados. Pero tenían un problema: sólo les quedaba medio litro de agua y ambos estaban ya muy deshidratados.

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Papá tenía que escoger: o calmar la sed de su hijo, o, tomarse el agua para poder cubrir aquella distancia. Decidió arriesgarlo todo y tomarse el agua.

De esa forma logró caminar los veinte kilómetros con toda su fuerza y llegar al río, donde efectivamente, fueron rescatados.

 

Varios días más tarde, mientras se recuperaban en un hospital, y papá contó esta historia; los médicos, indignados, le criticaron por su aparente egoísmo de haberle negado agua a su hijo.

 

Sólo un enfermero, que había servido varios años en el ejército y era experto en supervivencia les respondió:  "Que le hubiera dado el agua al niño solo habría servido para que muriera un día más tarde en la selva, víctima de alguna fiera... La única opción que tenía ese niño de sobrevivir era que su padre sobreviviera"